El pastel para cualquier celebración
Cuando llega el momento de decidir qué pastel escoger, te entra un “no sé qué” en la barriga que da miedo. Pero no os preocupéis, os voy a dar unos trucos para que os sea más sencillo elegir.
Para empezar, tener claro para qué tipo de celebración será el pastel:
Una boda, fiesta infantil, aniversario de empresa, fiesta temática… Saber esto nos facilita en gran medida la elección.
Supongamos que se trata de una fiesta infantil. Rápidamente podremos descartar las macrotartas de 4 pisos escalonados típicos de una boda. Ya que a los niños les gusta tener su propio pastel y probar todo tipo de pasteles diferentes.
En cambio, sí que podríamos apostar por un diseño con mini cupcakes de sabores variados junto con cakepops temáticos. Los sabores pueden ser más bien tradicionales como el chocolate, limón o frambuesa (quizá con menos probabilidad de que alguien les tenga alergia o intolerancia). O pueden ser más originales como lo son el de oreo, cookies, maracuyá, pistacho o caramelo.
Por otro lado, una idea creativa también es que los niños elijan los personajes de los cakepops: Elsa de Frozen, Spiderman, Cars… ¡Seguro que les encanta! Por último, mi recomendación sería que la tarta tuviera un solo piso para que el pequeñín pudiera soplar cómodamente las velas.
Este sería un ejemplo, ¿fácil verdad? Pues se trata de esto. Hay que definir cuál es la celebración. Luego pensar en quién son los invitados (niños, treintañeros, de 70 para arriba, etc.). El “quién” es muy importante. Es el que marcará la textura y la cantidad ideal que deberá tener el pastel. Una persona de 70 años va a preferir más un sorbete o un pastel tipo bizcocho para no tener que morder mucho. En cambio, a un treintañero le puede apetecer más un pastel de esos contundentes y sabrosos. Estas recomendaciones te pueden ayudar a ver qué dirección seguir para encontrar el pastel ideal para tu evento.
Por otra parte, recordad que un pastel no es exclusivamente para un aniversario,
Sino que sirve para cualquier celebración. Siempre que se reúnan 5 amigos, familiares, conocidos, es un buen momento para sacar una tarta y ¡comer dulce! Los postres enamoran, relajan y dan alegría. Entrar en una fiesta y ver una mesa repleta de pasteles, galletas… ¿Quién podría dejar de mirarla? Todos esperan a que el anfitrión diga: ¡Al ataque! Así que, no dudéis ni por un segundo en poner dulce en vuestras celebraciones porque tendréis el éxito asegurado.